sábado, 30 de abril de 2011

La historia es la historia de la lucha de clases

"Un "jüdenrat" entre los K"

Por Jorge Altamira  para Perfil

"El domingo 24/4 nos enteramos, por una nota en La Nación, de que José Pablo Feinmann repite en un “libro” que “Altamira tiene que cargar con el cadáver de Ferreyra, al cual mandó a cortar vías contra gente armada”.


Hay muchos militantes o intelectuales que se indignan ante esta insistencia en la calumnia, pero de lo que se trata es de caracterizarla. Es simple: el crimen de la burocracia de Pedraza pesa como un inmenso adoquín sobre las pretensiones progresistas de los K, y desnuda su necesidad de preservar la complicidad de la burocracia y la regimentación que ésta ejerce en el movimiento obrero. Mariano Ferreyra se yergue acusador contra el maridaje repodrido con la tercerización, con la gestión corrupta del ferrocarril, contra la tercerización de la represión a cargo de patotas reclutadas por la burocracia sindical. Mariano Ferreyra es la denuncia de una gigantesca impostura. El Partido Obrero es calumniado porque ha ido a la caza de los asesinos materiales, sociales y políticos de Mariano Ferreyra con todos los instrumentos de un programa revolucionario."

miércoles, 20 de abril de 2011

Tecnología sí, libros no.

La repartija de netbook a alumnos y docentes secundarios se da de bruces con la realidad de las escuelas sin personal, con decorados carcelarios, cada docente laburando quinientas horas en una docena de escuelas en todos los turnos posibles, amén del llamado "plan mejoras" que consiste en clases de apoyo por contratos precarios y pagadas en negro por el propio Estado.  Nadie se puede jactar de estar mejorando en nada la educación pública bonaerense.

jueves, 14 de abril de 2011

Vas por la calle llorando lágrimas de oro.

sábado, 2 de abril de 2011

Rezo por vos

Hay gente que reza en Facebook.  Es decir, hay gente pide cosas a Dios en el muro de Facebook .  Si rezar es condensar los deseo en un sintagma, en una oración, entonces ,¿es Facebook el nuevo territorio de los deseos?

viernes, 1 de abril de 2011

Balada del solidario

Se podrá discutir mi erudición ornitológica y la eficacia de mis aperturas de ajedrez. Nunca faltará algún zopenco que niegue la exactitud astronómica de mis horóscopos ¡pero eso sí! a nadie se le ocurrirá dudar, ni un solo instante, de mi perfecta, de mi absoluta solidaridad.

¿Una colonia de microbios se aloja en los pulmones de una señorita? Solidario de los microbios, de los pulmones y de la señorita. ¿A un estudiante se le ocurre esperar el tranvía adentro del ropero de una mujer casada? Solidario del ropero, de la mujer casada, del tranvía, del estudiante y de la espera.
A todas horas de la noche, en las fiestas patrias, en el aniversario del descubrimiento de América, dispuesto a solidarizarme con lo que sea, víctima de mi solidaridad.
Inútil, completamente inútil, que me resista. La solidaridad ya es un reflejo en mí, algo tan inconsciente como la dilatación de las pupilas. Si durante un centésimo de segundo consigo desolidarizarme de mi solidaridad, en el centésimo de segundo que lo sucede, sufro un verdadero vértigo de solidaridad.
Solidario de las olas sin velas... sin esperanza. Solidario del naufragio de las señoras ballenatos, de los tiburones vestidos de frac, que les devoran el vientre y la cartera. Solidario de las carteras, de los ballenatos y de los fraques.
Solidario de los sirvientes y de las ratas que circulan en el subsuelo, junto con los abortos y las flores marchitas.
Solidario de los automóviles, de los cadáveres descompuestos, de las comunicaciones telefónicas que se cortan al mismo tiempo que los collares de perlas y las sogas de los andamies.
Solidario de los esqueletos que crecen casi tanto como los expedientes; de los estómagos que ingieren toneladas de sardinas y de bicarbonato, mientras se van llenando los depósitos de agua y de objetos perdidos.
Solidario de los carteros, de las amas de cría, de los coroneles, de los pedicuros, de los contrabandistas.
Solidario por predestinación y por oficio. Solidario por atavismo, por convencionalismo. Solidario a perpetuidad. Solidario de los insolidarios y solidario de mi propia solidaridad.

Oliverio Girondo

Espantapájaros 23